Muchas cosas han parecido que últimamente han ido mal en mi vida porque sí. Podría darte una lista de lavandería, pero eso no mejoraría para ninguno de nosotros. Me he dado cuenta de algo, ya que he estado sentado solo todo el día con mis pensamientos y es algo que siempre he sabido, pero nunca he arrojado mucha luz.

Me di cuenta de que todo podría estar yendo mal para mí, pero no tengo control sobre esas cosas. No puedo controlar esas cosas. Lo único sobre lo que tengo control es cómo reacciono ante las cosas que van mal.

No tengo control sobre lo que sale mal, lo que otras personas hacen o deciden. Solo tengo control sobre mis acciones, elecciones y reacciones.



Puedo lanzar mis manos en el aire, sentarme en el piso mientras lloro en una pinta de Ben & Jerry (lo hice) pero nada cambió después de eso. Claro, sentí un poco de alivio al dejar salir todas las emociones que había estado enterrando e ignorando, pero nada mejoró, nada mejoró. Todavía estaba en la misma situación. Demonios, todavía estoy en la misma situación, pero estoy tratando activamente de cambiar la situación en la que estoy ahora.

Estoy tratando activamente de sacar lo mejor de lo que sucede incontrolablemente a mi alrededor. Estoy tratando de no aferrarme al estrés, la ira, la frustración, el miedo. Estoy tratando de dejarlo todo porque aferrarme a él no me está haciendo ningún bien. Aferrarse a él es abrigar y aferrarse al estrés creando más.

No puedo cambiar las cosas que han sucedido, las emociones que he sentido, las situaciones en cuestión, pero lo que puedo cambiar es mi reacción a todo. Puedo decidir mantenerme positivo a pesar de que siento que todo me está aplastando. Puedo decidir hacer todo lo que esté en el poder para ayudarme a salir de la situación en la que me encuentro. Puedo decidir que, en lugar de sentir pena por mí mismo, voy a hacer algo al respecto.



Dejar que tus emociones te controlen es fácil. Es fácil hacer y decir cosas en el momento en que te arrepientas en el futuro. Es fácil ponerse nervioso y crear una situación aún peor para usted porque lo único sobre lo que tenemos control es cómo reaccionamos ante las situaciones en cuestión.

No tienes control sobre lo que te sucede en la vida, pero sí tienes control sobre cómo respondes a lo que sucede.

Es un recordatorio simple pero importante.



Es importante simplemente respirar porque las cosas funcionarán de alguna manera, siempre lo hacen.

solidificar una relación

Es hora de dejar de lado lo que no puede controlar y aceptar lo que puede controlar, incluida su reacción ante las situaciones que tiene delante.