Ya no me sorprende cuando la gente me decepciona. Cuando dicen cosas que no quieren decir y rompen sus promesas. Cuando se van sin dar una buena razón. Cuando se escapan antes de acercarse.

Me sorprende cuando se quedan. Cuando aparecen Cuando se comunican Cuando no tienen miedo de mostrar que les importa.

Ya no me sorprende cuando la gente me da por sentado. Cuando solo toman la validación que necesitan de mí y luego desaparecen. Cuando constantemente buscan algo mejor. Cuando no aprecian lo que hago por ellos.



Jim debería haberse quedado con Karen

Me sorprende cuando dicen gracias. Cuando correspondan la misma amabilidad. Cuando aprecian el esfuerzo. Cuando están pensativos. Cuando te muestran lo que significas para ellos. Cuando te dicen que les importas.

Ya no me sorprende cuando las cosas se desmoronan. Cuando las cosas se desmoronan demasiado pronto. Cuando las cosas terminan prematuramente. Cuando las cosas más pequeñas pueden causar la mayor destrucción. Cuando rendirse es mejor que intentarlo. Cuando olvidar a las personas es más genial que recordarlas.

Me sorprende cuando la gente se queda y trata de arreglar las cosas. Cuando hacen crecer las cosas en lugar de arruinarlas. Cuando intentan quedarse. Cuando no te sueltan.



¿Qué significa cuando alguien dice que no te preocupes?

Ya no me sorprende cuando la gente me lastima. Las personas más cercanas a mi corazón. Los que amo Los que me importan. Lo entiendo. Todos están lidiando con su propio dolor. Todos están tratando de resolver su propia vida. Todos son egoístas e intentan hacer lo mejor para ellos. Todos no están atentos a menos que necesiten algo para ti.

Por eso me sorprende cuando la gente me hace sentir segura. Cuando eligen amabilidad y perdón sobre hostilidad. Cuando eligen ser cálidos y amorosos en lugar de fríos y distantes. Cuando eligen ayudarme en lugar de tratar de evitar cualquier responsabilidad. Cuando no ven las relaciones como ‘presión.'

Ya no me sorprende. Los juegos. Las señales mixtas. La fugacidad. El caos. El dolor de corazón. Realmente no lo hace. Me he vuelto inmune a todo eso. He venido estoico.



aprende a esconder tus sentimientos

Me sorprende cuando alguien me devuelve a la vida y me hace sentir bien volver a sentir. Me sorprende cuando alguien aparece y me inspira a aceptar mis emociones en lugar de obligarme a frenar cada una de ellas. Me sorprende cuando la gente viene y trata de arreglar las cosas en lugar de romperlas.