
Siempre he sido el tipo de persona que se disculpa por todo. Pido disculpas a la barista cuando hace mal mi bebida y le pido una nueva. Pido disculpas cuando la gente se topa conmigo sin dudarlo. Y me disculpo con todos y cada uno cuando cometo un error honesto.
trastorno de conversación dominante
Pero lo peor de todo es que me disculpo cada vez que hago algo por mí. Y siempre, siempre me siento mal por eso. Incluso si ese algo me estaba levantando. E incluso si ese algo, estaba haciendo que la vida valiera la pena.
No debería disculparme por hacer lo que me hace feliz. No debería disculparme por decirle que no a un hombre guapo en el club cuando me pide bailar conmigo. No debería disculparme por hacer que la vida de alguien más sea inconveniente. No debería disculparme por no ser encantadora todo el tiempo.
No debería disculparme por decir que no. No debería disculparme por decir que sí. Nunca, nunca debería disculparme por decir cómo me siento cuando lo siento.
Y tú tampoco deberías.
Al final del día, todos debemos hacer lo que sea mejor para nosotros. No importa las miradas, miradas o chismes. Al final del día, tenemos que hacer lo que nos ilumina después de un largo día de trabajo. Tenemos que dejar de disculparnos por ser nosotros mismos y por darnos una oportunidad.
Entonces, deja de disculparte por cada pequeña cosa. Deja de cuestionarte a ti mismo. Y deja de dudar de ti mismo.
Tú vales más de lo que crees que eres. Eres más especial de lo que crees que eres. Entonces, ve y haz lo que siempre has querido hacer. Ve y haz lo que siempre has soñado. Ve y vive la vida que quieres.
Ve a moverte por todo el país solo porque sí. Enamórate de alguien que es lo contrario de tu tipo. Vaya a barman en lugar de trabajar de 9 a 5. Ir de mochilero por toda Europa. Ve a buscar lo que sea que te haga brillar de adentro hacia afuera. Y hazlo sin pedir perdón.
No vivas la vida que todos los demás quieren que vivas.
Esto se trata de ti. Entraste en este mundo por ti mismo, y lo dejarás solo. Te conoces mejor que nadie. Entonces, siéntete orgulloso. Hazte un favor. Se amable con tus necesidades. Sé amable con tus deseos.
Y vive la vida para la que fuiste creado. Sin dudarlo. Y sin una disculpa.
No te detengas cuando alguien te diga que tengas cuidado. No dudes cuando la gente se burla de tus sueños. No te rindas cuando la gente te mire con desagrado.
Solo sal y vive tu mejor vida. Y mírate prosperar y lograr cosas que nunca supiste que eran posibles. Mírate a ti mismo volar. Y observa que nunca más vuelvas a decir 'lo siento' por hacer lo mejor para ti.